Cuando desde chica eres la princesita de la casa....y sueñas con castillos en el aire....con el tiempo descubres que esa no es la realidad...la realidad es otra, no existen las princesas ni los principes, no hay castillos ni sapos...solo humanos de carne y hueso...De igual modo mi corazon todavia se ilusiona con la llegada de mi principe...que ira a buscarme para amarme por siempre...y tendra mi cuento un final feliz...
Aunque esta princesita tuvo un camino, que a pesar de que querian allanarlo, fue muy duro, eso me hizo fuerte y me enseño a saber lo que quiero y luchar por conseguirlo...por mantenerlo...
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